NEGOCIANDO LA VENTA DEL COCHE USADO (II)

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Foto: http://autos.univision.com

Como ya dije en su momento, cuando quedemos con algún interesado en comprar nuestro coche, sería conveniente lavarlo antes de mostrarlo. De ese modo evitaremos la mala impresión que causan los vehículos sucios. Y no debemos olvidar que la venta de un automóvil depende muchísimo de las impresiones subjetivas.

A parte de eso, trataremos de crear un ambiente distendido y agradable en el que le explicaremos los principales puntos fuertes. No debemos olvidar que conocemos mejor que nadie nuestro propio coche, así que trataremos de hacer irrelevantes los defectos y potenciaremos las virtudes.

Se debe enseñar primero por fuera, empezando por la parte frontal, y dando una vuelta alrededor del vehículo. Cuando estemos junto al maletero, aprovecharemos para abrir el capó. No quiero ser reiterativo, pero debemos intentar que siempre esté limpio y lo más ordenado posible. La sensación de observar un maletero desordenado, lleno de trastos polvorientos o embarrados, es muy negativa. Somos muchos los que nos fijamos bastante en ese detalle, con el peligro de que alguien extrapole esa visión al carácter del propietario, identificándolo como sucio o descuidado.

Al finalizar la presentación exterior, invitaremos al comprador a sentarse primero en las plazas traseras –siempre que el coche sea de cuatro o cinco puertas-, y dejaremos para el final el puesto de conducción. Si viene acompañado, conminaremos a todos para que se acomoden con libertad. Sin embargo, si el automóvil es de tres puertas, es mejor no hablar de los asientos traseros siempre que no los mencione el comprador. Pero en caso de que quiera verlos, hay que aprovechar la tesitura para explicar que el acceso a la parte trasera es muy cómodo y que hay bastante espacio.

Cuando esté sentado al volante, le hablaremos de los equipamientos, tanto de serie como opcionales, tratando de mostrarle las funciones más llamativas como sistema de navegación, manos libres, equipo de audio,… En mi opinión, deberíamos tener el contacto dado para poder explicar los detalles más llamativos. Además, un cuadro de mandos se ve mucho más bonito si está encendido.

Cuando hayamos finalizado la explicación, podemos ofrecerle al interesado que pruebe el coche. Como hoy en día hay mucha inseguridad, para evitar sustos, debemos obviar este paso si el interesado no nos inspira la suficiente confianza y tenemos miedo de que pueda hacernos algo. Pero si no tiene mala apariencia –aunque hoy en día los delincuentes ya no llevan antifaz ni la cara tapada con un pañuelo- nos iremos a probar el vehículo conduciendo nosotros. Y esto es fundamental, ya que de ese modo podremos explotar las virtudes de nuestro automóvil mejor que nadie.

Y por hoy lo dejamos aquí. Permítanme que aparque este tema de un modo algo abrupto, aplazándolo para un próximo artículo. Creo que el siguiente post será de mucho interés, siendo especialmente atractivo para aquellos vendedores particulares que desean aprender siguiendo los sencillos consejos que les daremos mañana.

Negociando la venta del coche usado (I)

Negociando la venta del coche usado (III)

Negociando la venta del coche usado (IV)