Subastas de coches,¿vale la pena intentarlo?

Las subastas de coches parecen a primera vista una buena oportunidad para adquirir un vehículo de segunda mano a un precio menor que el del mercado. Pero ¿realmente son un chollo? Y de serlo ¿están al alcance de todo el mundo?

Hay diferentes tipos de subastas. Existen las subastas privadas, en las que se ponen a la vente vehículos procedentes en muchos casos de empresas de alquiler de coches. En estos casos suele tratarse de gamas medias en muy buen estado, pero a los que difícilmente tiene acceso el público en general ya que hay empresas dedicadas a comprar estas flotas y que manejan totalmente el mercado.

También hay subastas públicas. Por un lado están la de coches que han sido embargados por hacienda por diferentes motivos. Por otro lado los vehículos oficiales que se venden bien porque debido a los recortes se haya decidido prescindir de ellos o bien porque se renueven. Son coches que se adquieren tal y como están y sobre todo en el caso de embargos no suelen mostrarse precisamente impecables.

 

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La crisis ha cambiado un poco las cosas

Actualmente y debido a la crisis las cosas han cambiado ligeramente. Por un lado nos encontramos con menos casas de venta de vehículos de segunda mano y que estas son mucho más selectivas con los vehículos que adquieren. Por tanto hay una parte del mercado que les interesa menos y que queda más a disposición del cliente particular.

Por otro lado son más las personas que intentan conseguir un coche a un mejor precio y por tanto las presiones para abrir las subastas son mayores por lo que en muchos casos estas se producen de un modo mucho más transparente y abierto.

 Arriesgado y farragoso

Lo cierto es que comprar un coche en una subasta sigue siendo algo arriesgado, pues realmente no vas a saber el estado real del vehículo hasta que lo tengas en tus manos. Además muchas veces vas a tener que costearte reparaciones que aunque sean evidentes puedes no saber realmente por cuánto van a salirte hasta que el vehículo entre en taller.

Hoy por hoy, aunque más sencillo que antes continúa siendo complicado comprar el coche en una subasta y a no ser que conozcamos a alguno de los organizadores y nos garantice que estamos haciendo un buen negocio, la mejor opción generalmente será adquirir el coche en un concesionario dónde al menos tendremos todas las garantías legales sobre lo que estamos adquiriendo.