Dic 29 2016
NEGOCIANDO LA VENTA DEL COCHE USADO (IV)
Al terminar la prueba del coche es donde debemos desplegar todas nuestras dotes de persuasión. Si tenemos en cuenta que durante la prueba de conducción nuestro vehículo debe hablar por nosotros, ahora es el momento en que debemos darlo todo y quedar a la altura.
Una buena forma de romper el hielo y entrar en materia es preguntarle al posible comprador acerca de las sensaciones que ha experimentado conduciendo. Lo más fácil es preguntarle directamente si le ha gustado el automóvil o no. Si responde afirmativamente, podemos decirle medio en broma medio en serio que cómo desea realizar el pago. Aunque es algo abrupto, muchas veces la gente quiere que le demos un empujoncito cariñoso para tomar la decisión.
Pero si la respuesta es que no, podemos indagar el motivo por el que no le ha gustado e intentar rebatir las objeciones, que no son otra cosa que pequeñas señales del interesado solicitando ayuda para quedarse con nuestro vehículo. Y no debemos olvidar que siempre es preferible tratar con alguien que nos dice que el coche le parece pequeño, que el embrague sale muy alto o que está caro; antes que con alguien que, tras finalizar la prueba dinámica, toma el camino de su casa despidiéndose con un frustrante “ya te llamaré si eso”.
No me canso de repetir que para vender un automóvil de ocasión hay que armarse de paciencia y no desanimarse a la primera de cambio. Por eso debemos analizar objetivamente las objeciones que plantea el comprador y dar una respuesta adecuada a las mismas. Se puede entender que ya estamos en la fase de negociación, que es donde un español medio se siente más a gusto. Por ello, debemos hacer ver a la otra parte que nuestras concesiones se tienen que ver recompensadas con reciprocidad.
Como ejemplo típico siempre pongo el caso de la objeción por excelencia en la venta de vehículos usados: “el coche es muy caro”. Nuestra reacción debe ser templada, serena y conciliadora: “si bajase el precio, ¿te quedarías con el automóvil?”. La pelota está en su tejado, ya que estamos pidiéndole que se comprometa y que tome una decisión. Si hemos hecho bien las cosas, tendremos algo de margen de maniobra para poder bajar el precio. En este caso no debemos precipitarnos quitando todo lo que habíamos inflado de un golpe, ya que probablemente las dificultades no hayan acabado aún. Y es que la gente tiene por costumbre apretar y apretar incansablemente.
Nos encontramos en el momento crucial para el cierre de la venta. Más que nada porque, llegados a este punto, casi todo el mundo se descubre, pudiendo saber si realmente está interesado en adquirir el vehículo o regatea por diversión. Si hemos fijado correctamente el precio, debemos ser algo más firmes y exigirle su compromiso previo de quedarse con el coche a cambio de una rebaja. Si nos pide que le quitemos más dinero, podemos hacer dos cosas: encastillarnos en nuestra posición poniéndonos más duros; o podemos rebajar lo poco que nos quedaba del precio hinchado. Pero aquí debemos ser algo más sutiles, ya que si no hacemos bien las cosas podemos introducirnos en un bucle de descuentos interminable.
Hay que saber plantear esa última rebaja con la suficiente habilidad como para obtener el esperado acuerdo. Y en esto hay que ser conscientes de que no todos los negocios nos interesan. En ocasiones, es preferible no vender el coche a venderlo mal, con un grave perjuicio económico para nuestro bolsillo. Cada uno debe saber en qué momento es mejor apartarse y no plegarse a las exigencias de un comprador desalmado y buscachollos. En nuestra mano está el que hagamos una operación que nos satisfaga plenamente. De cualquier forma, como el tema es apasionante y estoy seguro de que se habrán quedado muchas cosas en el tintero, continuaré escribiendo artículos en los que explicaré trucos y consejos que le ayudarán a encarar las objeciones en una negociación de venta.
Negociando la venta del coche usado (I)
Negociando la venta del coche usado (II)
Negociando la venta del coche usado (III)
Ene 18 2017
ANTES DE COMPRAR UN COCHE, SE DEBE PROBAR
Igual que es importante realizar una inspección visual tanto del interior como del exterior del vehículo que nos interesa adquirir, también es fundamental que realicemos una prueba dinámica del mismo antes de decidirnos por él. En mi opinión, también habría que hacer la prueba para adquirir un coche nuevo, pero no todos los vendedores están dispuestos y además no siempre se tienen todos los modelos de las amplias gamas de cada fabricante. Los reacios a probar un automóvil nuevo suelen añadir también que todos los coches nuevos van bien y que si no se es experto no vamos a encontrar diferencias entre uno u otro modelo. A esto yo siempre contesto que las pruebas se pueden hacer de dos clases: de un modo profesional, analizando una serie de aspectos, y teniendo conocimientos que nos permitan las comparaciones con otros modelos similares. La otra posibilidad es la prueba normal en la que el futuro comprador debe analizar las sensaciones que le transmite el vehículo, si se siente a gusto o no, si está dispuesto a pasar en él una gran parte de su vida. Sobretodo porque hay muchos coches bonitos que son horriblemente incómodos una vez que se circula en ellos.
Pero para adquirir un automóvil usado, la prueba dinámica es absolutamente imprescendible, ya que de ese modo podremos detectar posibles fallos que pasarían desapercibidos con el coche parado.
Personalmente prefiero que el recorrido de la prueba se lleve a cabo por una ruta similar a la que hagamos habitualmente. Si solemos circular por ciudad, una gran parte del test debe desarrollarse en ciudad. Comprobando la agilidad en el tráfico diario. Incluso hay que buscar alguna zona con buenos espacios de aparcamiento para comprobar cómo son las maniobras, si es cómodo para aparcar, si no hay que dejarse los brazos girando el volante. Incluso así, es conveniente salir algo a carretera, para que podremos conocer el tipo de aceleración que tiene y la respuesta dinámica.
Para clientes que circulan mucho por autovía, el sitio recomendado es, obviamente, una autovía o autopista. Allí veremos qué tal alcanza la velocidad punta y qué tal la mantiene. Podremos probar asistencias a la conducción y mantener velocidades constantes más altas, donde comprobaremos sonoridad y dinámica de marcha.
Por otra lado, si se circula por carreteras sinuosas lo lógico es buscar una ruta con curvas, preferiblemente en carretera de dos sentidos, en donde observaremos cómo se comporta en curvas entrelazadas, el tarado de las suspensiones, sobretodo cuando se exige el máximo esfuerzo en los cambios de apoyo. Además, ese será un recorrido que también nos permitirá experimentar las reacciones del vehículo en adelantamientos, viendo cómo responde el motor, el reprise que nos muestra, su capacidad de recuperación a bajas revoluciones, si es elástico o no.
By Altrade • Consejos para comprar • 0 • Tags: antes de comprar, coche de ocasión, coche usado, coches lanzamiento, Consejos, cortesía, demo, Flotas de renting, indicios de engaño, kilómetro cero, nuevo, prueba del vehículo, prueba dinámica, qué mirar en un coche usado, renting, seminuevo, sustitutivo, vehiculo, Vehículos usados